The Charis Awards
The CHARIS Awards son unos premios que celebran la creatividad humana potenciada por la IA.
Otorgan premios en diferentes expresiones creativas tales como Fotorealismo, Artes Visuales, Moda y Arquitectura.
Las piezas seleccionadas serán expuestas en el museu IAMA (International Art Museum of America) de San Francisco, a final del año 2024.
Las piezas seleccionadas serán expuestas en el museu IAMA (International Art Museum of America) de San Francisco, a final del año 2024.
He sido galardonado en la categoría de imagen fotorrealista con una mención honorífica con esta imagen llamada "La hora del patio".
La pieza iba acompañada del texto que podéis leer más abajo.
Era el único momento del día que les dejaban salir solos del colegio.
Podían salir afuera, a jugar.
A la hora del patio.
Hacía ya semanas que no había explosiones.
Pero las últimas bombas habían dejado un paisaje que les asustaba con la misma fuerza que les atraía.
Cuando el sol se ponía, ver los últimos rayos del día a través de las ventanas de los edificios vacíos, era lo más parecido a un espectáculo de sombras chinas.
Así que se plantaban allí a contemplarlo, para ellos era otro juego más.
Además, sin saberlo, ellos iban a ser los arquitectos del futuro.
La guerra destruye edificios y vidas; y amenaza con quebrar el espíritu humano. Sin embargo, la inocencia y la resiliencia de los niños demuestran que, incluso en los tiempos más oscuros, hay una luz que no puede ser extinguida.
La determinación de reconstruir y vivir en paz es siempre más fuerte.
Podían salir afuera, a jugar.
A la hora del patio.
Hacía ya semanas que no había explosiones.
Pero las últimas bombas habían dejado un paisaje que les asustaba con la misma fuerza que les atraía.
Cuando el sol se ponía, ver los últimos rayos del día a través de las ventanas de los edificios vacíos, era lo más parecido a un espectáculo de sombras chinas.
Así que se plantaban allí a contemplarlo, para ellos era otro juego más.
Además, sin saberlo, ellos iban a ser los arquitectos del futuro.
La guerra destruye edificios y vidas; y amenaza con quebrar el espíritu humano. Sin embargo, la inocencia y la resiliencia de los niños demuestran que, incluso en los tiempos más oscuros, hay una luz que no puede ser extinguida.
La determinación de reconstruir y vivir en paz es siempre más fuerte.
